Trump inicia su visita de Estado al Reino Unido

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inició su visita de Estado al Reino Unido con una recepción de gran solemnidad en el Castillo de Windsor. Acompañado por la ex primera dama Melania Trump, fue recibido por el rey Carlos III y la reina Camila, junto a los príncipes de Gales, Guillermo y Catalina, en una ceremonia cargada de símbolos históricos y militares.

La jornada comenzó con honores militares que incluyeron a más de mil soldados y una cabalgata de caballería, seguidos por un desfile que mostró la tradicional pompa británica. Un carruaje real transportó a los visitantes hacia los jardines del castillo, donde se realizó la inspección de la guardia de honor. Posteriormente, Trump depositó una ofrenda en la tumba de la reina Isabel II, en la capilla de San Jorge, como gesto de respeto.

La agenda del día incluyó un almuerzo privado con los monarcas, la visita a una exhibición de la Colección Real que destaca la relación angloestadounidense y, finalmente, un banquete de Estado en honor al visitante. Estas actividades buscan reforzar los lazos diplomáticos entre ambos países, en un contexto marcado por la cooperación en defensa, comercio y tecnología.

Sin embargo, la visita no ha estado exenta de polémica. Grupos de manifestantes se congregaron en las inmediaciones del castillo y en Londres para expresar su rechazo, proyectando incluso imágenes críticas en los muros de Windsor. Estas protestas reflejan la polarización que genera la figura de Trump tanto en Estados Unidos como en Europa.

El recibimiento a Trump, con un despliegue sin precedentes en años recientes, subraya la relevancia de los vínculos históricos entre Washington y Londres. Más allá de las diferencias políticas, la visita busca enviar un mensaje claro: la alianza entre el Reino Unido y Estados Unidos sigue siendo estratégica y fundamental en el actual escenario internacional.