MLB: Astros en caída libre con cuatro derrotas consecutivas ante los Athletics

Los Houston Astros atraviesan su peor semana de la temporada tras sufrir una dolorosa barrida en una serie de cuatro juegos ante los Oakland Athletics, un equipo que, en el papel, no representaba una amenaza seria para el conjunto tejano. Del jueves 24 al domingo 27 de julio, los Astros fueron superados de forma contundente, generando preocupación tanto en los aficionados como dentro de la organización, justo cuando se aproxima la recta final de la temporada regular.

El primer revés llegó el jueves, con una derrota por 5-2. Lo que parecía un tropiezo aislado se convirtió rápidamente en una pesadilla: el viernes 25, Oakland apabulló a Houston con una paliza de 15-3. El sábado, el equipo dirigido por Joe Espada volvió a carecer de respuesta ofensiva y cayó 5-1, y el domingo la serie se cerró con otro duro golpe, esta vez por 7-1. Cuatro derrotas, 32 carreras en contra y apenas siete anotadas: un balance preocupante para una novena con aspiraciones de campeonato.

Pese a la mala racha, los Astros aún se mantienen como líderes de la División Oeste de la Liga Americana. No obstante, la ventaja se reduce cada vez más, mientras equipos como los Seattle Mariners y Texas Rangers comienzan a acercarse peligrosamente en la tabla. La inconsistencia del bullpen, la falta de producción de jugadores clave y un bateo oportunamente ausente han sido factores determinantes en el declive reciente del equipo.

“Hay que dar vuelta la página, pero también entender qué está fallando”, declaró el mánager Joe Espada tras la derrota del domingo. “Oakland jugó muy bien, pero nosotros no estuvimos a la altura. Este tipo de series pueden costarte la temporada si no reaccionas a tiempo”.

Con la fecha límite de cambios a la vuelta de la esquina, la directiva de los Astros enfrenta ahora decisiones cruciales: ¿reforzar el cuerpo de lanzadores?, ¿apostar por un bateador de impacto? Lo cierto es que la serie ante los Athletics ha encendido todas las alarmas en Houston, y la posibilidad de perder el liderato del Oeste ya no parece tan lejana.