Costa Rica evaluará continuidad de Miguel “Piojo” Herrera

Ante los resultados poco convincentes de la Selección de Costa Rica en la Eliminatoria rumbo al Mundial 2026, la Federación Costarricense de Fútbol se prepara para reunirse y determinar si Miguel “Piojo” Herrera continuará al frente del banquillo nacional, según reportes de la prensa tica. El debate se ha intensificado tras empates y actuaciones que no han cumplido con las expectativas de aficionados y especialistas.

Herrera, quien asumió con la promesa de impulsar un cambio generacional y reposicionar a Costa Rica como protagonista en la región, ha enfrentado críticas luego del empate 1-1 con Nicaragua y del 3-3 ante Haití, donde la “Sele” dejó escapar ventajas importantes. Estos resultados han encendido las alarmas en la dirigencia federativa sobre si el rumbo actual es el adecuado para la fase decisiva de la Eliminatoria.

La prensa costarricense ha sido enfática en su evaluación: múltiples medios destacan que los empates, especialmente tras ir en ventaja, evidencian fallas tácticas, problemas de concentración y falta de cohesión colectiva. Además, las expectativas generadas al inicio del ciclo, cuando Herrera prometió no solo clasificar, sino hacerlo con solidez, contrastan con los resultados obtenidos hasta ahora.

Por su parte, Herrera ha defendido su gestión, afirmando que aún hay margen de mejora y que las “enseñanzas” de torneos recientes como la Copa Oro y la propia Eliminatoria servirán para corregir errores. También señaló que su compromiso con Costa Rica es total de cara al Mundial y que los rumores sobre su salida son simples “chismes” que prefiere ignorar.

En la Federación, la hoja de ruta parece incluir un análisis riguroso de los próximos partidos, tanto de local como de visita. Si se confirma la continuidad del entrenador, este deberá demostrar mejoras en la solidez defensiva, la eficacia ofensiva y, sobre todo, en la capacidad de sostener las ventajas.

De lo contrario, podría abrirse la puerta a un relevo en el banquillo si los resultados no acompañan. En todas estas decisiones pesa no solo el aspecto deportivo, sino también la presión de la afición, los medios y los intereses de cara al Mundial.